jueves, 2 de agosto de 2012



Y descubrí que algo había cambiado, ya no era lo mismo. Fue entonces cuando me dí cuenta de que tus caricias ya no iban acompañadas de sonrisas, que a tus te quiero no los apoyaban tus ojos, que ya no me abrazabas al dormir y que yo ya no soñaba contigo. Me dí cuenta de que hacía tiempo que nuestros besos no expresaban nada y de que cuando me dabas la mano era para no darme tu amor.

Hace un tiempo que ya no estás conmigo, un tiempo en el que no te has vuelto a pasar por mis sueños, en el que mi cama te ha echado de menos y en el que tu almohada impregnada de tu aroma me ha servido de consuelo.

Una vez me pediste un favor, hoy yo te pido otro: un billete con destino a tu corazón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario