Es curioso, me has dicho tantas veces que te olvidase... que no sentirías nada por mí. Y aquí sigo, con la misma ilusión, esa que me provoca tantas decepciones. La vida es tan ingenua, ¿quién coño dijo que viviríamos siempre junto a la persona a la que amamos? Han sido tantas las veces en las que he llorado por todo, en las que he deseado alejarme de todo, dejar de sentir. Dejar de sentir... suena tan ridículo como pensar que algún día me querrás, ¿verdad? En realidad, no te juzgo, nunca lo he hecho y nunca lo haré. De echo, a pesar de ser la que peor lo pasa soy la primera que te defiende. Y puede que incluso tú, el que estás leyendo, me llames tonta por ello, te daré la razón. ¿Para qué negarlo? Si no lo fuese no estaría pensando en como tus ojos te llevan la contraria cuando me dices que nunca me has querido.